Statement

Colores vivos, altos contrastes, texturas intensas. La muerte como celebración al trascender: lo tangible y comprobable, desde una visión que imprime emociones en figuras esparcidas con libertad y al mismo tiempo con el detenimiento y precisión necesaria para traducir lo inaudible, lo que con palabras no se alcanza a definir.
El despertar conciencia sobre el presente: cuestionar las ideas que han sido implantadas desde la niñez, los bombardeos mediáticos y la conducta social, con la probable intención de dar cabida a la capacidad de cambio y crecimiento como persona, desmoronando el “Yo soy” que se enjaula en los entornos de cada individuo, condicionado bajo las reglas y estándares que en un contexto sociocultural han sido creados.


Uniéndonos más allá de la materia, como entes regidos bajo las mismas normas universales, que gozan de parámetros desinteresadamente otorgados por el solo hecho de estar vivos; generando reflexión y criterios propios que pasan a ser un reflejo de la lectura personal, más allá que la del mismo creador de la obra.


Pinceles, espátulas o dedos, brochas, son herramientas guías para moldear figuras en soportes de lienzo o madera. Algunos restos de metales o juguetes desechados pasan a ser parte del discurso, trascendiendo así la bidimensionalidad de los lienzos, uniendo las esculturas blandas, el performance en un mismo discurso que engloba lo infinito de la creatividad en una reinterpretación de un mundo autodenominado: PEMOLANDIA.